Hiperplasia Prostática Benigna

por | Ene 31, 2021 | Patologías urológicas más comunes

¿Qué es la hiperplasia prostática?

Es un agrandamiento benigno de la glándula prostática.

La glándula prostática se encuentra debajo de la vejiga. El conducto que transporta la orina desde la vejiga hacia el exterior del pene (uretra) pasa por el centro de la próstata. Cuando la próstata se agranda, comienza a obstruir el flujo de orina.

La hiperplasia benigna de próstata (HBP) es el tumor benigno más frecuente en el varón mayor de 50 años.

La mayoría de los hombres presentan un crecimiento continuo de la próstata a lo largo de la vida. En muchos hombres, este crecimiento continuo agranda la próstata lo suficiente como para provocar síntomas urinarios o para obstruir considerablemente el flujo de orina.

No queda totalmente claro qué provoca el agrandamiento de la próstata. Sin embargo, podría deberse a cambios en el equilibrio de las hormonas sexuales a medida que los hombres envejecen.

Factores de riesgo

Los factores de riesgo del agrandamiento de la glándula prostática son los siguientes:

  • Envejecimiento. Es poco frecuente que el agrandamiento de la glándula prostática cause signos y síntomas en hombres menores de 40 años. Aproximadamente un tercio de los hombres experimentan síntomas de moderados a intensos a los 60 años, y aproximadamente la mitad lo hacen a los 80 años.
  • Antecedentes familiares. Tener un pariente consanguíneo, como un padre o un hermano, con problemas de próstata significa que es más probable que tengas problemas.
  • Diabetes y enfermedad cardíaca. Los estudios demuestran que la diabetes, así como la enfermedad cardíaca y el uso de betabloqueantes, podrían aumentar el riesgo de hiperplasia prostática benigna.
  • Estilo de vida. La obesidad aumenta el riesgo de hiperplasia prostática benigna, mientras que el ejercicio puede reducirlo.

¿Cuáles son los síntomas?

  • Necesidad de orinar frecuentemente o con urgencia.
  • Aumento de la frecuencia de la orina por la noche (nicturia).
  • Dificultad para comenzar a orinar o necesidad de pujar.
  • Flujo de orina débil o que se detiene y vuelve a comenzar.
  • Goteo después de orinar.
  • Imposibilidad de vaciar la vejiga por completo.

El tamaño de la próstata no determina necesariamente la gravedad de los síntomas. Algunos hombres con agrandamiento leve de la próstata pueden tener síntomas importantes, en tanto que otros hombres con mayor agrandamiento de la próstata pueden tener solo síntomas leves.

Diagnóstico

Consiste en la combinación de historia clínica detallada y examen físico que incluye un tacto rectal, el médico inserta un dedo en el recto para detectar agrandamiento.

Además de análisis de sangre para el antígeno prostático específico (PSA). El antígeno prostático específico es una sustancia que se produce en la próstata. Los niveles de antígeno prostático específico aumentan en casos de agrandamiento de la próstata. Sin embargo, los niveles elevados de antígeno prostático específico pueden deberse a procedimientos recientes, infección, cirugía o cáncer de próstata.

Después de eso se recomiendan pruebas adicionales para ayudar a confirmar el agrandamiento de la próstata y descartar otras enfermedades. Estas pruebas comprenden las siguientes:

Prueba del flujo urinario. Debes orinar en un recipiente que está conectado a una máquina que mide la fuerza y la cantidad de tu flujo urinario. Los resultados de la prueba ayudan a determinar si tu afección mejora o empeora con el tiempo.

Prueba de orina residual posterior al vaciado. Esta prueba mide si puedes vaciar tu vejiga por completo. Esta prueba puede hacerse mediante una sonografía.

Si tu trastorno es más complejo, es posible que el médico recomiende:

  • Ecografía transrectal. Se inserta una sonda ecográfica en el recto para medir y evaluar la próstata.
  • Biopsia de la próstata. La ecografía transrectal guía a las agujas que se utilizan para tomar muestras de tejido (biopsias) de la próstata. El examen del tejido puede ayudar al médico a diagnosticar o descartar el cáncer de próstata.
  • Cistoscopia. Se inserta un instrumento flexible y con luz (cistoscopio) dentro de la uretra, que le permite al médico ver el interior de la uretra y la vejiga, así como la posible obstrucción que este produciendo la próstata.

Tratamiento

Hay una amplia variedad de tratamientos disponibles para el agrandamiento de próstata, entre ellos, medicamentos, terapias mínimamente invasivas y cirugía.

La mejor opción de tratamiento depende de varios factores:

  • El tamaño de la próstata
  • Edad
  • Estado de salud general
  • El grado de molestias o trastornos

Los medicamentos son el tratamiento más frecuente para los síntomas leves a moderados del agrandamiento de próstata.

La terapia mínimamente invasiva o quirúrgica puede recomendarse si:

  • Tienes síntomas de moderados a graves
  • Los medicamentos no han aliviado los síntomas
  • Tienes una obstrucción de las vías urinarias, cálculos en la vejiga, sangre en la orina o problemas renales
  • Prefieres un tratamiento definitivo

Hay varios tipos de terapia mínimamente invasiva o quirúrgica como son:

  • Resección transuretral de la próstata.

Se introduce un endoscopio iluminado en la uretra y el cirujano extrae todo salvo la parte externa de la próstata. Por lo general, la resección transuretral de la próstata alivia rápidamente los síntomas, y la mayoría de los hombres tienen un flujo de orina más fuerte muy pronto después del procedimiento.

  • Terapia con láser

Un láser de alta energía destruye o elimina el exceso de tejido prostático. La terapia láser generalmente alivia los síntomas de inmediato y tiene menos riesgo de efectos secundarios que la cirugía sin láser. La terapia láser puede usarse en hombres que no deberían someterse a otros procedimientos prostáticos porque toman medicamentos anticoagulantes.

  • Prostatectomía abierta

El cirujano realiza una incisión en la parte inferior del abdomen para alcanzar la próstata y extraer tejido. La prostatectomía abierta generalmente se hace si tienes una próstata muy grande, daños en la vejiga u otras complicaciones. Normalmente, la cirugía requiere una breve estancia hospitalaria y está asociada con mayor riesgo de requerir una transfusión de sangre.

Complicaciones

Las complicaciones del agrandamiento de la próstata pueden comprender:

  • Incapacidad repentina para orinar (retención urinaria). Es posible que necesites que te inserten un tubo (sonda) en la vejiga para drenar la orina.
  • Infecciones urinarias. La incapacidad para vaciar completamente la vejiga puede aumentar el riesgo de infección en las vías urinarias. Si las infecciones en las vías urinarias se presentan con frecuencia, es posible que necesites cirugía para extraer parte de la próstata.
  • Cálculos en la vejiga. Estos generalmente se producen debido a la incapacidad de vaciar completamente la vejiga. Los cálculos en la vejiga pueden causar infección, irritación de la vejiga, sangre en la orina y obstrucción del flujo de orina.
  • Daño en la vejiga. Si la vejiga no se ha vaciado por completo, esto puede hacer que se estire y se debilite con el tiempo. Como consecuencia, la pared muscular de la vejiga ya no se contrae correctamente, y esto hace que sea más difícil vaciar completamente la vejiga.
  • Daño renal. La presión en la vejiga debido a la retención urinaria puede dañar directamente los riñones o permitir que las infecciones en la vejiga lleguen a los riñones.

0 comentarios

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *