¿Qué es la epididimitis?

La epididimitis es una inflamación de la estructura tubular (epidídimo) que se encuentra en la parte posterior del testículo, y que almacena y transporta el esperma. Los varones de cualquier edad pueden desarrollar epididimitis.

Factores de riesgo

Algunos comportamientos sexuales que pueden provocar infecciones de transmisión sexual te ponen en riesgo de contraer epididimitis transmitida sexualmente, entre ellos:

  • Relaciones sexuales con una pareja que tenga una infección de transmisión sexual.
  • Relaciones sexuales sin preservativo.
  • Antecedentes de infecciones de transmisión sexual.

¿Cuáles son las causas?

  • Infecciones de transmisión sexual. La gonorrea y la clamidia son las causas más frecuentes de epididimitis en hombres jóvenes activos sexualmente. A veces, también se puede inflamar un testículo, lo que da lugar a un trastorno denominado «orquiepididimitis».
  • Otras infecciones. Las bacterias de una infección de las vías urinarias o la próstata pueden propagarse desde la zona infectada al epidídimo. Además, las infecciones virales, como la que provoca el virus de las paperas, pueden provocar epididimitis.
  • Orina en el epidídimo (epididimitis química). Este trastorno aparece cuando la orina se retrae hacia el epidídimo, y se da posiblemente por haber levantado cosas pesadas o por haber hecho demasiado esfuerzo.
  • Traumatismo. Una lesión de ingle puede causar epididimitis.
  • Tuberculosis. En raras ocasiones, la infección de tuberculosis causa epididimitis.

Síntomas

Los signos y síntomas de la epididimitis comprenden:

  • Dolor de testículo y sensibilidad, generalmente de un lado, que suele aparecer en forma gradual.
  • Escroto hinchado, enrojecido o caliente.
  • Dolor al orinar o necesidad urgente o frecuente de orinar.
  • Secreción del pene.
  • Dolor o molestia en la parte inferior del abdomen o en la zona pélvica.
  • Sangre en el semen.
  • Con menos frecuencia, fiebre.

Complicaciones

Las complicaciones de la epididimitis incluyen las siguientes:

  • Infección con pus (absceso) en el escroto.
  • Orquiepididimitis, si la afección se propaga del epidídimo al testículo.
  • En raras ocasiones, disminución de la fecundidad.

Diagnóstico

El diagnóstico se realiza con la historia clínica y el examen físico, el médico comprobará si hay ganglios linfáticos agrandados en la ingle y un testículo agrandado en el lado afectado.

Tratamiento

Se necesitan antibióticos para tratar la epididimitis bacteriana. Si la causa de la infección bacteriana es una infección de transmisión sexual, tu pareja también necesitará tratamiento. Completa todo el tratamiento con antibióticos recetados por el médico, incluso si los síntomas desaparecen antes, para asegurarte de que la infección haya desaparecido.

Deberías comenzar a sentirte mejor dentro de las 48 a 72 horas posteriores a la primera toma del antibiótico. Descansar, sujetar el escroto con un suspensorio, aplicar compresas de hielo y tomar analgésicos puede ayudarte a aliviar las molestias.

¿Cuándo consultar al médico?

Nunca ignores el dolor o la hinchazón del escroto que puede producirse a causa de diversas afecciones. Algunas de ellas requieren tratamiento inmediato para evitar daño permanente.

Si el dolor de escroto es intenso, busca tratamiento de urgencia. Consulta con un urólogo si tienes secreción del pene o dolor al orinar.

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